viernes, 14 de marzo de 2014

Empezando a emprender

A la hora de realizar un emprendimiento hay muchos casos de éxitos y casos desastrosos, pero ¿por qué? Bueno hay tres patas en esta mesa: el conocimiento, la transpiración y la suerte. Con dos de esas variables uno puede tener éxito. Yo recomiendo aprender y sobre todo trabajar porque con la suerte por las dudas no contar.

El emprendedor debería aportar siempre algo nuevo. Por esto es muy importante que sean creativos
Hay que mirar más allá y romper con lo establecido, como dijo Henry Ford: “Si le hubiera preguntado a la gente qué querían, me habrían dicho que un caballo más rápido”

Pero si están decididos algunos tips:
  • Arriesgarse, cuando vale la penaEmprender implica un riesgo. Hay que asumirlo como tal y estar preparado. Hay que saber que estamos arriesgando. Que nuestro plato de comida dependa del éxito del proyecto no es bueno, entre otras cosas puede llevarnos a malas decisiones.
  • Los pies en la tierra. La magia, por más que nos duela, no existe.  Si esperan crear un producto para que este en todas las casas para este fin de semana, eso no va a suceder. Ni hay que mentirse, los proyectos llevan un tiempo entre la planificación, el comienzo y el momento de establecerse. Por ejemplo para un restaurante esta calculado en 3 años.
  • Investigar. Hay que analizar al equipo, el espacio donde va a utilizarse, y los requerimientos/necesidades para su desarrollo. Nada es más importante. Para esto existen diferentes análisis y planificadores como pueden ser el FODA o el modelo CANVAS.
  • No solo cuenta el dinero. Hay cuestiones que evidentemente resuelve el dinero. Pero hay otras soluciones que no dependen del dinero. Incluso algunas que parece que sí, pero no (Acá es una de los momentos en donde se transpira buscando las soluciones).
  • El equipo es más que la suma de las partes. Cuando un equipo esta bien armado, se complementa. Puede aportar distintas tareas y conocimientos y además funciona. En definitiva cada persona se potencia.
  • Los límites reales. Hay veces lo que nos frena es real, pero hay otras oportunidades en donde uno mismo pone límites. Piensen lo imposible, quiten los prejuicios y miedo y transpiren la camiseta.

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